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domingo, 28 de agosto de 2011

La Sal de la Tierra

"La sal es buena; pero si la sal se vuelve insípida, ¿con qué la sazonarán? Tengan sal en ustedes y estén en paz los unos con los otros." (Marcos 9:50).

"Vosotros sois la sal de la tierra"
Jesús era un Maestro sorprendente. Sus enseñanzas maravillaban a sus seguidores, y también a sus enemigos. A menudo utilizaba lecciones de la naturaleza para dar a conocer sus enseñanzas. Las multitudes “se admiraban de su enseñanza; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas” (Marcos 1:22).


En una de sus disertaciones, hizo una interesante declaración: “Vosotros sois la sal de la tierra” (Mateo 5:13). Mirándolo desde nuestra perspectiva del siglo XXI podríamos pensar que esta declaración es denigrante, e incluso ofensiva. ¿Por qué comparar a sus seguidores con algo tan menudo y tan común? Olvidemos por un momento nuestra actualidad, y revisemos cuidadosamente la historia.

domingo, 21 de agosto de 2011

El Mito de la Ciencia Infalible

“¿De dónde, pues, viene la sabiduría? ¿Y dónde está el lugar de la inteligencia? Dios entiende el camino de ella, y conoce su lugar” (Job 28:20, 23).

Según el gráfico, la materia oscura constituye el 30% de la
composición del cosmos.
En el mes de julio de 2010 salió publicado en el New York Times un artículo titulado como nuestra reflexión de hoy, publicado por Carlos Cunha. A continuación veamos lo que expone en su artículo.

“A través de la ciencia, no sólo descubrimos lo que no sabíamos, sino lo que creíamos que sabíamos, pero que no era así. Algo que durante siglos quizá haya sido tomado como una verdad evidente, como que la tierra era plana, por ejemplo, puede quedar expuesto como un mito. Lo que fácilmente puede pasar inadvertido es que incluso la ciencia no siempre sabe lo que cree que sabe. El mito, en la forma de especulación teórica, es la mezcla de cemento en la que se colocan muchos de los ladrillos de los descubrimientos científicos.


domingo, 14 de agosto de 2011

Sólo fue un Malentendido

"El que retiene sus palabras tiene conocimiento, y el de espíritu sereno es hombre entendido"  (Proverbios 17:27) 

La Ciudad de Hiroshima, luego
de la bomba atómica.
Gravemente maltrecho se hallaba el Japón en la primavera de 1945. El general Korechika Anami, ministro de la guerra, prometía que los estadounidenses serían expulsados de Okinawa. Convencidos de que más ganaría el Japón rindiéndose que continuando la guerra hasta el final, un pequeño grupo de diplomáticos se oponían a los militaristas, y con la esperanza de obtener condiciones mejores que una rendición incondicional, iniciaron conversaciones secretas con la Unión Soviética, todavía neutral, buscando la mediación de Rusia para concertar la paz. Como por casualidad, Stalin mencionó ante el presidente Truman, en Potsdam, que los japoneses habían expresado deseos de iniciar negociaciones. Pero el dictador soviético manifestó que Rusia había rechazado la insinuación por insincera. 


domingo, 7 de agosto de 2011

El Enigma de Pigafetta

“Enséñanos a contar de tal modo nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría” (Salmo 90:12).

El "jet lag" es más facil de asimilar 
cuando se viaja hacia el oeste
que cuando se viaja hacia el este.
¿Has oído hablar del “jet lag”? Se le conoce como como descompensación horaria, disritmia circadiana o síndrome de los husos horarios. Se le llama así al efecto sobre el cuerpo que sufren comúnmente aquellos ejecutivos, artistas y también pilotos que hacen viajes intercontinentales frecuentes. Se reconoce este síndrome como algo realmente moderno, sin embargo, fue descubierto –y experimentado– por primera vez hace más de 400 años.

Fue en pleno Renacimiento cuando regresó la expedición de Magallanes y se llevaron la sorpresa de su vida al ver que les faltaba un día. Y es así: el ocho de septiembre de 1522, en el puerto de Sevilla, desembarcaron los dieciocho sobrevivientes de la expedición que al mando de Magallanes —muerto durante el viaje— había partido tres años antes (el 10 de agosto de 1519) con cinco naves y 250 tripulantes. Y esos dieciocho sobrevivientes habían dado la vuelta al mundo.